A pesar de la buena imagen que preserva dado al apoyo con el que cuenta en algunos importantes medios de información católica (en parte por ser auspiciados o administrados por reconocidos miembros de este movimiento), terminan este año con una Misa no aprobada y en estudio por parte de la Congregación para la Doctrina de la Fe, con nuevas y mayores denuncias por heterodoxia palpables en las redes sociales de Internet y con unos cada vez más importantes señalamientos de posibles fundamentos y peculiaridades disonantes con el sentir católico y que apuntan a identificarlos como parte activa de la tan temida y rechazada hermeneútica de la ruptura post-conciliar, contraria a la hermeneútica de la continuidad pedida por el Papa.
Termina también desafortunadamente, con una imagen de no atención a correcciones eclesiásticas y sabida inflexibilidad ante la crítica, estimando sus miembros que esta proviene de sentimientos oscuros ajenos al llamado a la unidad y a la sana doctrina y práctica. Sin ahondar en palabras puntuales, he acá un extracto de las mil y una conversaciones tenidas en foros de Internet con agentes neocatecumenales, que dada la singular consciencia que han creado en ella sus catequistas, no reconocen que están viviendo parte de una comunidad que necesita de inmediato realineamiento:
En este año de la fe, uno de los llamados recibidos por parte del Sínodo de obispos para la nueva evangelización (p.128) fue "el CORAJE DE DENUNCIAR las INFIDELIDADES y los escándalos que emergen en las comunidades cristianas – como signo y consecuencia de una reducción de tensión en esta tarea del anuncio – es parte de esta lógica del reconocimiento de los frutos. Se necesita coraje para reconocer las culpas, mientras continúa el testimonio de Jesucristo y de la perenne necesidad de ser salvados" . En ello y esperando la rectificación y las buenas praxis de todos los movimientos de la Iglesia, ABC Apologética se abstiene de recomendar el Camino Neocatecumenal a sus lectores bajo la sospecha confirmada de desobediencia a las recomendaciones litúrgicas emitidas desde la Congregatio de Cultu Divino et Disciplina Sacramentorum, extralimitación de sus permisos estatutarios, desaciertos doctrinales y actuales prácticas no conformes al magisterio de la Iglesia Católica.
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